En la Biblia, encontramos grandes profecías y visiones que revelan el plan de Dios para Jerusalén y las naciones, como Isaías, que habla de la restauración de todas las cosas, donde hasta los árboles batirán palmas en celebración. Jeremías, puesto como profeta a las naciones, narra actos didácticos que anuncian un nuevo éxodo. Ezequiel nos muestra visiones del tercer Templo y la necesidad de atalayas vigilando Jerusalén. Daniel comparte sueños sobre la persecución del Anti-cristo y la promesa del reino del Mesías. Finalmente, el Apocalipsis, con su contexto hebreo, revela la apertura de sellos por el Cordero y las 7 copas de la ira que marcan el inicio del reinado divino.